Hoy continuamos nuestro viaje por el mundo. Nos dirigimos hacia otro continente. Os daré una pista: ¡Es un lugar de la Tierra muy frío!
Preparad todas las prendas de abrigo. ¡Nos vamos a la Antártida!
Vamos a descubrir este continente:
Bueno, yo creo que hace demasiado frío allí. ¿Qué creéis vosotr@s? ¿Os habéis fijado en que allí casi no hay plantas y los animales tienen que alimentarse del mar? ¿Qué animales habéis visto?
Como nos gustan mucho los pingüinos, vamos a cantar y a bailar con ellos a la vez que repasamos los números:
Ahora vamos a jugar a un juego:
Tendréis que decir cuántos hay pero sin contar. Os adelanto que el número mayor que vamos a ver es el 5. ¿Estáis preparados?
¡Seguro que lo habéis hecho fenomenal!
Esta semana es muy especial, puesto que todos los cuentos y libros del planeta celebran su cumpleaños. Por ello dedicaremos un apartado especial a la literatura infantil. Disfrutaremos trabajando los distintos géneros:
Ahora, os voy a recordar un cuento que nos gusta mucho ver en el Kamishibai, "Pescadito, pescadito". Como ya sabéis trata de lo importante que es COMPARTIR.
¡TENEMOS UN PROBLEMA! ¡ESTE KAMISHIBAI ESTÁ DEMASIADO FRÍO! ¡NO PUEDO ABRIRLO, ES IMPOSIBLE! POR FAVOR, ¿ME AYUDÁIS A SOPLAR A VER SI COGE SU TEMPERATURA? A LA DE TRES, TENÉIS QUE SOPLAR MUY MUY FUERTE. ¿ESTÁIS PREPARADOS? ¡ 1, 2 Y..... 3!
¡LO HABÉIS HECHO GENIAL! ¡AHORA SÍ!
Como tengo algún problema técnico para grabarlo, vuestros familiares os lo irán contando. Aunque, como os gusta tanto, seguro que se lo podéis contar vosotros.
Muchos creeréis que en el Polo Sur, en el final del mundo, solamente hay agua, hielo y playas desiertas. A ese lugar le llaman Antártida y es tan frío que no vive nadie, ni siquiera en verano. Bueno, nadie, nadie...
Os presento a Don Pin. Es un pin....güino que vive en una playa muy al sur, allá donde hace mucho frío. Don Pin sabe nadar, bailar y andar despacito, pero no sabe volar. A Don Pin le gustan los camarones y los pescaditos.
Esta es la Señora Llena. Es una ba....llena. Exacto. Y también vive muy al sur, allá donde el mar está lleno de hielo. La Señora Llena sabe saltar fuera del agua y bucear hasta el fondo, pero tampoco sabe volar. A la Señora Llena también le gustan los camarones y los pescaditos. Como buenos vecinos, Don Pin y la Señora Llena se llevan bien y se dan los buenos días cuando se encuentran.
Pero hoy ha ocurrido algo en la playa. Esta mañana ha aparecido un pescadito en la orilla. Ni en la arena ni en el agua, sino justo en el medio. Don Pin lo ha visto desde lejos y ha pensado:
"¡Mmmmmmm, el desayuno!"
Se ha acercado al pescadito y justo antes de zampárselo ha escuchado a su espalda una voz muy fuerte y profunda:
"EJEM, buenos días..."
La Señora Llena está detrás de él, en la orilla, justo donde rompen las olas. La grandísima ballena está mirando con ojos golosos el pescadito.
Con voz muy fuerte y profunda dice:
"Perdone que le interrumpa, pero yo lo he visto primero ese pescadito y tengo la intención de desayunármelo"
Don Pin mira al pescadito justo a sus pies y responde a la ballena:
" No se lo discuto, Señora Llena, pero yo llegué antes y también tengo la intención de desayunármelo. Además, si se lo come usted seguro que seguirá con hambre."
Debéis saber que las ballenas comen muchos pescados de un solo bocado y que su estómago es más grande que un coche.
Entonces la señora Llena contesta al pingüino:
"Puede ser que me quede con hambre, Don Pin. Pero si se lo come usted quizá se atragante."
Como habréis adivinado los pingüinos comen pescados pero de uno en uno, y sólo si son lo suficientemente pequeños para tragárselos.
"Pues sepa usted que si se le clava una espina en la lengua, le dolerá mucho y tendrá que ir al hospital para que le curen los cangrejos cirujanos."
Los cangrejos cirujanos se ocupan de curar las heridas de los habitantes del mar.
Pero la Señora Llena sigue decidida a no compartir el pescadito, así que intenta desanimar al pingüino
"Fíjese Don Pin, ese pescadito no parece muy fresco y no huele muy bien. ¿Y si se lo come y se intoxica? Seguro que se pasa una semana en la cama con fiebre y dolor de tripa."
Don Pin y la Señora Llena se miran fijamente, retándose con la mirada como en las películas de cowboys. Ninguno de los dos quiere renunciar a su desayuno.
En ese momento aparece volando desde el cielo la Señorita Viota. Sí, lo habéis adivinado. La Señorita Viota es una ga-vio-ta. Le gusta parlotear todo el día con sus amigas y coleccionar conchas. La señorita Viota vuela estupendamente, pero no tiene muy buenos modales.
Al ver que la ballena y el pingüino no se ponen de acuerdo, la Señorita Viota agarra el pescadito y se va sin decir ni pío. Don Pin y la Señora Llena miran cómo la gaviota se aleja volando hacia el cielo con el pescadito en el pico.
A la Señora Llena y a Don Pin se les queda cara de bobos. Su desayuno ha volado por los aires porque no han sido capaces de ponerse de acuerdo. No han probado ni mucho ni poco del delicioso pescadito.
Entonces se dicen "Buenos días tenga usted" y se van cada uno por su lado, pensando que, siempre es mejor un poquito que nada y que compartir merece la pena.
Y COLORÍN COLORADO
ESTE CUENTO SE HA
TERMINADO
Espero que os haya gustado recordarlo.
Para terminar esta jornada tan fría os dejo con los "Octonautas y el Narval" para que disfrutéis:
Pasad un buen día ¡Hasta mañana!
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